PARIS



Desde el Aeropuerto de Miami a la espera del penultimo vuelo de este increible viaje subo la penultima entrada al blog. La proxima espero pueda ser en BsAs ya cerrandolo, y sino sera en Mdeo....

Paris es Paris, nose si eso transimte algo... pero es la frase que se me ocurre para resumir lo que es esta ciudad..yo tuve la suerte de conocerlo anteriormente, y cada vez esta mejor.

Gracias a Iame que compartio su hogar conmigo.

En breve estare por ahi.

Saludos

Matias

MARRUECOS



Antes de poner algunas líneas sobre la ida al país del Cuscús quiero expresar que me hubiese gustado escribir algo de cada ciudad.. pero la misma excusa de siempre.. el tiempo.. quedara para mas adelante o simplemente lo hare en mis relatos en alguna comida.
Bueno.. la idea a Marruecos no fue un destino mas del viaje. Fue algo que lo teníamos que pensar bien, no estábamos-estamos con mucho tiempo (tenemos que estar el 12 de noviembre en Paris para entregar la camioneta y además un viajero se nos sumaba: el seba, hermano de Santi, que llegaba el 24 y se iba el 29 ) por eso no podíamos darnos el lujo de perder tiempo por mala organización.
La cosa fue así… pasamos a buscar al Seba por el aeropuerto de Málaga, seguimos camino hasta Ronda, un pueblo en las montañas donde el primo de Gianni esta viviendo. En Ronda dejamos todo nuestro equipaje (por seguridad), que ya a esta altura es mucho y la mayoría guarda cosas que tienen valores sentimentales mas que monetarios (como por ejemplo entradas o chapitas de todas las cervezas que se fueron consumiendo a lo largo del viaje). Hecho esto, arrancamos rumbo a un camping llamado Paloma a 2 horas 30 de distancia de Ronda, y a 30 minutos de Algeciras, ciudad puerto donde realizaríamos el cruce al continente Africano.
Luego de dormir 5 horas salimos rumbo a Algeciras, ya teníamos los pasajes reservados así que el tramite fue rápido. Nos despedimos de Wilson que la dejamos en el parking del puerto (vacía) y nos subimos al Ferry. Se suponía que el trayecto demoraba hora y media pero se ve que algo estaban regalando en el puerto de Tánger porque no pudimos entrar así que nos quedamos flotando como media hora hasta que se desocupo un lugar.
Una vez en suelo Marroquí empezó la carrera, eran 10 y 20 de la mañana y el tren que nos depositaba en Marrakech salía a las 11. No lo podíamos perder sino teníamos que esperar hasta las 14, hora en que salía el próximo. Si eso pasaba llegaríamos a Marrakech a medianoche cosa que no nos servía porque teníamos que arreglar la excursión al desierto para la mañana siguiente.
La forma más rápida era ir en taxi, pero teníamos que pelearles el precio porque se avivan y te cobran hasta 3 veces más de lo que vale. Por suerte llegamos a tiempo, nos sobraron 10 minutos y todo.
El viaje en tren es un cuento aparte.. en resumidas cuentas.. el trayecto duraba unas 10 horas, no es que era súper lento, sino que paraba en tanto pueblo había. Lo que sabíamos era que a las 13:45 nos teníamos que bajar y tomar otro tren. La primera parte la llevamos bien, en el vagón hacia un tanto de calor, y un grado medio alto de olor a tercer tiempo que nos hacia recordar nuestro paso por India, Turquía y-o Egipto, pero bueno.. Habían asientos. La cosa se complico cuando nos subimos al segundo tren… estaba hasta las tabas por no decir bolas. El tren se confeccionaba de 10 compartimentos por vagón y cada uno de ellos tenía 6 asientos. Hay dos tipos de billetes, primera clase y segunda, la diferencia mayor no es en la calidad del compartimento, sino en que primera tenes asiento asignado en cambio segunda estas a la merced de la suerte, cosa que no tuvimos. Fue así que viajamos desde las 14 hasta las 21 en el piso de un vagón, cual teníamos que abrir la puerta para poder estar un poco mas a gustos. Fue una experiencia inolvidable que no recomiendo a nadie.
Al fin en Marrakech, la estación nos sorprendió para bien, también es lógico que después de estar 7 horas en el piso de un tren uno se conforme con poco, pero esta no era la situación. Esta buena enserio la estación de trenes, parecería ser nuevita, y para alegría de algunos contaba con el restaurante de comidas rápidas mas conocido en el mundo (no voy a hacerle propaganda). Luego de una cena rápida, y de pelearnos nuevamente con los tacheros llegamos a la plaza de Marrakech. Primera impresión de los Marroquíes, están pasados, se pelean todo el tiempo o por lo menos eso parece. También son muy cariñosos, ya que el toqueteo esta nuevamente presente, no tan llamativo como en la india pero está ahí, se percibe. La plaza de Marrakech era famosa para mi, por esas casualidades de la vida, un día en casa prendí la tele y estaba travel and living, y estaba el gordito pelado que viaja y prueba comidas exóticas justo en la plaza donde yo estaba parado en ese momento. Muchos puestos de comidas uno al lado del otto, un humo blanco que te envuelve completamente y gente caminando de acá para allá, y muchos gritos. Ahí estábamos nosotros, 13 personas con mochilas y carry ons viendo para donde arrancar. Sabíamos que habían conocidos que habían llegado antes y algún dato tenían que tener, lo único que teníamos que hacer era contratar esa excursión al desierto para la mañana siguiente. Y así fue, luego de llegar a un hotel y negociar precio conseguimos lo que queríamos: 3 días, 2 noches una de ellas en el desierto, con desayuno y cena y lo más importante salíamos a la mañana siguiente.
Esa noche dormimos en una casa que nos proporciono ese hotel.. típica casa marroquí se podría decir, patio al medio donde dan las habitaciones. Nuevamente dormimos 5 horas, ya que a las 7 estábamos arriba para comenzar nuestra travesía hasta el Sahara.
Nuestro vehículo era una camioneta, que contaba con un chofer, una vaca (donde iba todo el equipaje) y un guía (que lo pedimos en la hora porque el que manejaba solo hablaba árabe), y una radiocasetero. Salimos rumbo al desierto..
La primera parada fue en las montañas del Atlas, paramos a desayunar, gran vista (ver fotos). nuestro guía ahí ya se empezó a soltar, su nombre Ibrahim pero nosotros lo lapodamos Brian (no le gusto mucho), termino siendo un loco de mierda pero bien, en parte hizo mas divertía la excursión.
La segunda parada la hicimos en una Kasbah (ciudades muy antiguas construidas en mayor parte por barro) llamada Ait Benhaddou, supuestamente aquí se filmaron algunas películas como Hércules y Asterix y Obelix. Había que cruzar una especie de arroyo, y unos nenes te ayudaban a cruzarlo (ver fotos) la recompensa para ellos fueron unos caramelos. Una vez dentro de la “ciudad” entramos a una casa típica, fue una experiencia interesante.
Almorzamos en un pueblo más adelante llamado Ouarzazat, ahí probamos el tajine (puede ser de carne, pollo o simplemente verduras, ver fotos), una de las comidas típicas de Marruecos. Es muy parecido al puchero nuestro, solo que tiene más especias, donde sobresale el uso del curry. A alguno de nosotros nos cayo ligerito.. así que la visita al baño no se hizo esperar (un dato: al igual que en India y en Egipto el papel higiénico no es habitual, por lo general son remplazado por linda canillita a pocos centímetros de la tasa turca.
En la tarde seguimos metiendo ruta, fueron unas 3 horas cruzando montañas hasta llegar al lugar donde pasamos la noche, un hotel muy cómodo a orillas de un rio, cenamos cuscús (que no esta bueno) dormimos y a las 8 de la mañana a la ruta nuevamente.
Las 3 paradas que hicimos fueron en la garganta de Toudra (ver fotos), para almorzar y en una marmolería. No podíamos perder mucho tiempo, teníamos que llegar antes del atardecer a la puerta del Sahara así veíamos la puesta del sol en el desierto.
Al final de la ruta nos esperaban los camellos, asi que dejamos los bolsos y salimos para el desierto, vimos el atardecer arriba de los dromedarios… muy bueno.. creo que las fotos dan una idea. Llegamos al campamento ubicado entre las dunas ya de noche. Luego de escuchar un poco de tamborileo cenamos (tajine de pollo). Por ultimo antes de acostarnos fuimos a subir una de las dunas (costo muchísimo) para poder apreciar mejor en donde estábamos… el desierto. El cielo estaba espectacular.. no había ni una sola nube .. Impresionante.
Nos despertaron a las 5 de la mañana para emprender el regreso y poder ver amanecer (nuevamente una hora de trayecto a camello). Muy lindo también.. Llegamos a la posada donde habíamos dejado las cosas, desayunamos y nos subimos nuevamente a la camioneta para así emprender el viaje a Marrakech.
Una vez en Marrakech buscamos un hotel para pasar la noche, esta vez nuestro ya “amigo” Brian nos ayudo, aunque era medio pelo el “hotel”, bueno por 4 euros no se puede pedir mucho mas.. Como la mayoría en Marruecos eran habitaciones que daban a un patio central (sin ventanas). Fuimos a la plaza, probé caracol (muy salado), caminamos por las tiendas, los mozos te agarran del brazo y te tratan de convencer que comas en sus “restaurantes”, es un relajo, cada tienda con un numero.. de película.. nos sentamos en la número 32.. 15 minutos después de haber terminado de comer estaba vomitando.. y 45 minutos después con diarrea.. Maravilloso.. pero bueno.. Fuimos 7 los que comimos ahí.. solo a 2 nos paso eso,.. una gastroenterocolitis galopante que nos obligo a llamar al doctor (hablaba árabe y francés y unas 15 o 20 palabras en ingles) y permanecer encerrados al día siguiente y no poder conocer mas de la ciudad.
La vuelta a Tanger fue nuevamente en tren, pero esta vez decidimos sacar tickets en primera, que nos aseguraba estar en asientos, así que luego de una noche de viaje llegamos a dicha ciudad, para luego hacer el cruce a España.
En conclusión fue una experiencia distinta, conocer un nuevo país, el segundo para mí del continente africano, romper con la “comodidad” europea y volver a una cultura tan alejada a lo que estamos acostumbrados. El desierto fue una recompensa, no fue fácil llegar ahí, muchas horas de viaje, y mucho cansancio en una etapa del viaje que es distinta para todos, algunos deseando volver, otros queriendo que este sueño no termine nunca, y otros donde me incluyo que quieren y no quieren, el no saber.. y aca les dejo una frase que todos los que estamos por acá alguna vez dijo.. tal vez sea un tanto absurda y de difícil de entender … “.. “estaría bueno tomarse una vacaciones del viaje y estar un fin de semana en Montevideo”.
Queda poco…
Un saludo, Matias ( 8/11 Santiago de Compostela, España)

TOLEDO - GRANADA

MADRID